{"id":99,"date":"2016-03-27T03:13:52","date_gmt":"2016-03-27T06:13:52","guid":{"rendered":"https:\/\/norbertorabinovichblog.com\/?p=99"},"modified":"2018-07-02T19:40:54","modified_gmt":"2018-07-02T22:40:54","slug":"la-voz-del-amo-o-la-poletica","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/norbertorabinovichblog.com\/la-voz-del-amo-o-la-poletica\/","title":{"rendered":"La voz del amo o la pol\u00e9tica"},"content":{"rendered":"
<\/strong><\/p>\n Publicaci\u00f3n original:<\/strong> Blog de Frenando Mires<\/p>\n Como casi todos los pueblos de Latinoam\u00e9rica los argentinos hemos padecido durante varios per\u00edodos el yugo de dictaduras militares. La l\u00f3gica pol\u00edtica de estos reg\u00edmenes no es muy diferente de la que rein\u00f3 a lo largo y ancho del planeta desde los or\u00edgenes de la historia: el que ejerce el poder (reyes, faraones, emperadores, se\u00f1ores feudales, etc.) se atribuye el derecho de imponer su voluntad al pueblo. Pueden o no invocar ser representantes de una autoridad superior, divina, pero detentan de hecho el derecho de ser sus int\u00e9rpretes indiscutibles. Para sostener el orden dentro de esta l\u00f3gica pol\u00edtica, no se necesita otro recurso que la coerci\u00f3n y el castigo. Quiero decir, que no requieren que el pueblo tenga fe en sus versiones para subordinarse a su autoridad, aunque no excluye el intento de ganarse luego cierta popularidad.<\/p>\n